Macetas hechas con garrafas
Los envases de plástico en los que se comercializa agua o refrescos con gas son ideales para reciclar por su resistencia y durabilidad. En este artículo recopilo diversas ideas de macetas hechas con garrafas o con botellas de refresco de 2 l que espero poder hacer algún día. Poco a poco, tampoco hace falta hacerlas todas de golpe.
Desde luego, lo más natural y ecológico y fácil es cortar las garrafas o las botellas y no pintarlas; la única manipulación adicional que hace falta es hacerles cinco o seis agujeritos en el fondo para que el agua no se quede estancada. Puedes usar un soldador, si tienes uno a mano, o un punzón o un palo metálico de pinchito que antes de hacer el agujero calentarás con una vela. Con un mechero también funciona, pero tiende a recalentarse todo menos el palito metálico.
Cómo cortar las garrafas
Esta opción es muy fácil de hacer y sirve para cultivar flores, hierbas aromáticas o rabanitos, que se desarrollan muy rápido. Sólo hay que recortar un rectángulo en uno de los lados de la garrafa. No olvides hacer varios agujeros bien distribuidos en la base.
Para plantas de mayor envergadura, como tomateras, que necesitan más tierra para desarrollarse, corta la parte superior de una garrafa de agua de 5 u 8 l.
Las botellas de refresco de 2 litros pueden cortarse por la mitad y ofrecen una estupenda base que, además, si decides pintarlas, pueden ser las patitas de diferentes animalitos. Ten en cuenta recortar también las orejitas. Por ejemplo:
Gatitos… Sorprendentes y sorprendidos (Izquierda y derecha) y un conejo demoníaco (centro). No hace falta ser un dibujante excelente para conseguir buenos resultados; marca con lápiz las facciones que quieres usar (basta con algunos trazos geométricos) y repásalas con un rotulador permanente o con un pincel mojado en pintura. el gatito de la derecha tiene dos tapones de refresco a modo de ojos. Foto del artículo Macetas originales con botellas de plástico de Craftologia.
Mi vecina es mi ídola. Sin ningún rubor ni pudor ha pintado sus propias macetas a su aire. El romero proporciona a este erizo sus pinchos. ¡No queremos ser perfectas! ¡Nos rebelamos contra las cositas cuquimonas divinas de la muerte!
Y en la siguiente foto un búho muy resultón; como los búhos no tienen cuatro patitas (que es lo que ofrecen de serie las botellas de refresco) mi vecina ha reutilizado la parte de arriba de la botella y le ha dado la vuelta. Me pregunto si la maceta está atada a la reja o pegada al alféizar para que se aguante. En esta foto puede apreciarse perfectamente lo bien que funcionan los motivos geométricos para caracterizar a los animalitos maceteros. ¡La amo!
Pintar las macetas
Usa una pintura al látex con base de agua, porque se fija mejor y dura más, o una pintura plástica acrílica (en algunos establecimientos la conocen como pintura acrílica, pero, en todo caso, fíjate que sea con BASE DE AGUA; es más ecológica y no mancha tanto :-D).
Preparación
Enjuaga bien las botellas que vayas a pintar y déjalas secar. Lija la superficie a pintar con un papel de lija fino (siempre en la misma dirección) para que la pintura se fije mejor. Pasa las botellas por debajo del chorro del grifo para eliminar cualquier rastro de lijaduras, deja que se sequen y pasa un trapito humedecido en agua para eliminar cualquier mancha.
Las posibilidades de las macetas hechas con garrafas o con botellas de plástico son enormes… En este tutorial La ciudad del huerto nos explica cómo hacer una maceta mariquita con una botella de 2 l. Los ojos y la boquita son trazos muy sencillos. Antes de dar los últimos toques a tu creación decide cómo vas a resolver el tema de ojos, nariz y boca.
Pintar y cantar
Pinta las botellas con un pincel, distribuye bien la pintura, pero da pinceladas en una sola dirección para que el acabado quede lo más liso posible. Si quieres mezclar tus propios colores, consulta el artículo Mezclar colores es sencillo.
Dibuja a lápiz las facciones de los animalitos maceta y repasa con un pincel fino.
Otra creación de mi vecina, mi heroína, un erizo con los pinchos alborotados. Si usas una garrafa acostada, lo más fácil es pintar el tapón de color negro o de un color llamativo para que haga de hocico.
Estas coquetas macetas hechas con botellas de refresco demuestran que no hay que ser Velázquez para conseguir buenos resultados; simplemente se trata de escoger bien los colores y caracterizar al animal con sus rasgos distintivos. A mí me encanta el búho.
Ideas parar crear coquetos cerditos. Los agujeros en los hocicos son definitivos.
Este gatete negro, que tiene hasta cola, podría ser una maceta o un contenedor para una maceta más pequeña. En este caso los ojos y la naricilla están hechos con goma eva.
Un ratón enorme (los bigotes hacia abajo y los ojos hechos con dos puntos junto a las orejas redondeadas son clave para caracterizarlo) que tiene como amigo un gato (las orejas triangulares son características de estos felinos) y un simpático perro de ojos ahumados que parece un poco trasto.
…Y un bello pingüino con detalles de goma eva.
Al igual que transformas garrafas en macetas creativas y ecológicas, puedes añadir un toque de cuidado y personalización para tu bebé con accesorios como chupeteros personalizados y collares de lactancia. Los chupeteros personalizados ofrecen un detalle único y estimulante para tu peque, fomentando su exploración y destrezas manuales. Los collares de lactancia, además de ser un accesorio estético para la mamá, capturan la atención del bebé y estimulan sus sentidos, haciendo de la lactancia un momento aún más especial y vinculante.
¡Felices creaciones!